Calle Doctor Galíndez, 03:00, 17 años.

Después de salir de los pubs cuando íbamos hacia casa, justo en la entrada a La Calle, un hombre de entre 25-30 años se nos acercó para pedir fuego. Nosotras (éramos 3) le dijimos que no teníamos, a lo que él se me acercó a mí para decirme que seguro que tenía pero que no le quería dar. Yo ahí le dije que no y que nos dejase en paz de forma educada, a lo que él me empezó a decir que si me iba con él a buscar fuego y a insistir para que entrase en La Calle con él, además de mirarme de forma descarada las tetas. En ese momento, yo me encaré a él y le dije que se fuese, acompañado de insultos varios. Fue entonces cuando mis amigas se metieron en medio y él se dirigió a mí de forma despectiva sobre mi físico y se marchó.

A pesar de que esta fue la vez que peor lo pasé, son muchas las veces que al salir de fiesta en La Calle hombres de diferentes edades me tocan las tetas o el culo disimulando, aunque de forma muy descarada.